Comportamiento de los paisas
Fabricando un paisa
Sigamos...
Le dió un gusano - nuche - en toda la estrella del ano por estar cagando en cualquier rastrojera.
Alguna vez se bañó con jabón de tierra para matarse los piojos.
Cuando entraba o salió de la iglesia se santiguaba con agua bendita para librarse de todo pecado y malos pensamientos.
Haber hecho trampas de cajón para coger ratas y chuchas, o trampas de palitos para cazar palomitas, pinches, tótrolas y guacharacas.
Por maldad o para hacer un sancocho haberse robado una gallina con un grano de maiz amarrado a a una cuerda de nylon.
Haber usado como linterna o farol un calabazo o un tarro metálico con una vela adentro para caminar de noche.
Alguna vez haber pescado con barbasco o dinamita.
Tuvo un nacido - sabañón o furúnculo - y lo reventón con panela derretida y tabaco o con pomada de cariaño.
Usted debe ser liberal o conservador.
Sólo cree en los curitas de sotana negra, los de ahora son unos reencauchados.
Siempre dió limosna en las misas del Domingo.
Todos los viernes santos por la noche se desvelaba esperando que ardiera el fuego donde estaba la guaca, que floreciera la yerba buena y el helecho.
Quemó una culebra viva para que le salieran las patas.
Se hizo sobar de una mujer preñada el mico o Tortícolis para que se le bajara.
Entablilló la pata quebrada de su perrito o gato.
A los pollitos tullidos les envolvió las paticas con hojas de chilca gallinaza calentada la cual hacía las veces de espadrapo y esto los ponía a caminar.
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Cuando niño comió gelatina con papel y todo para que le rindiera.
Construyó un altar en una barranca al santo que más que le hacía los milagros.
De niño siempre quiso ser cuando grande, aviador, policía o cura.
Crónica escrita por Carlos E. Alvarez
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