Poemas del alma y para el almaA mi abueloComo tejas viejasque aquella casa abriga con tantas historias que contar y a tantas cosas se obliga como sueños al volar al son de una melodía aquellas tejas envejecen sin dejar de abrigar. Y si mudan de colores como jardín de otoño y si marchitan las flores no dejan de ser jardín ni de historias, sin amores. Quien no olvide, aquel jardín de lindas flores, en primavera es como el tiempo que pasó aquel que el viejo cuenta y llora en casa donde el recuerdo mora una linda historia sin fin que la bendición de Dios implora. Para mí, cuando niño querido viejo era mi abuelo. Más tarde mi papá también mudó el abuelo dejó de contar historias que luego mi papá, contó ahora a mis nietos, cuento yo aquella que me enseñó Como la canción del destino que el abuelo contó.
Cabellos blancos, es recuerdo
Autor - Anónimo.
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